DIFERENCIA ENTRE APRENDER PARA SABER Y APRENDER PARA SERVIR.
Decimos que un buen estudiante es aquella persona, que cumple con todas sus tareas, aprueba toda evaluación, asiste a clases y que mantiene un comportamiento adecuado como alumno hacia sus maestros, aunque este no comparta su don con nadie y no ayuda a ninguno de sus compañeritos; también decimos que un buen profesional es aquel que sabe hacer su trabajo y que sabe trucos y artimañas para solventar cualquier dificultad que se le presente, aunque esto signifique pasar por encima de los demás, tener un carácter altanero y soberbio, sin pensar en ayudar al necesitado, sino solamente colaborar con aquel del que puede sacar un beneficio.
ECLESIATES 1:13-18
Y di mi corazón a inquirir y a buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo; este penoso trabajo dio Dios a los hijos de los hombres, para que se ocupen en él. Miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu. Lo torcido no se puede enderezar, y lo incompleto no puede contarse. Hablé yo en mi corazón, diciendo: He aquí yo me he engrandecido, y he crecido en sabiduría sobre todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; y mi corazón ha percibido mucha sabiduría y ciencia. Y dediqué mi corazón a conocer la sabiduría, y también a entender las locuras y los desvaríos; conocí que aun esto era aflicción de espíritu. Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia; y quien añade ciencia, añade dolor.
Cualquiera que sea la actividad que realizamos o para la cual nos preparamos, debemos mantener una actitud humilde, siempre al servicio de los demás.
Estando en la ciudad de Guatemala, estudie un seminario de 6 meses para preparar y dar clases a niños en la iglesia donde asistía, estaba muy contento y entusiasmado por enseñarle a los niños, pero de pronto como si una voz me hablara al oído, escuche: “que bien que enseñaras a los niños y niñas, pero ¿Quién le enseñara y explicara la Biblia a tu hijo?, quizás esto te parezca absurdo, tonto o increíble de creer, pero lo que si hay de cierto en esto es que lo poquito que aprendí, debía transmitirlo, y porque no comenzar con mi familia que tanto lo necesita.
A veces nos afanamos tanto en leer y aprender, que nos olvidamos la importancia de transmitir lo aprendido, de nada sirve devorar libros enteros o aprenderse de memoria la Biblia, si en realidad ni transmitimos el conocimiento y mucho menos, damos un buen testimonio.
Ya no busques tantas respuestas, no intentes comprender la lógica de Dios, no pretendas doblar el plan perfecto que el Señor tiene para cada uno de nosotros, si quieres servir, pues ésta es una de las maneras mas sencillas pero poderosas, transmitiendo conocimiento: el temor y amor a Jesucristo, no es tu trabajo en el mundo lo que te dará mas o mejores referencias con Dios, El mira tu corazón, así que vive con el corazón, sueña y ama con el corazón y permite que Jesús viva en el y guíe tu vida.
Dios te bendiga.